Bariloche aguarda la habilitación final de su aeropuerto, suspendido por las cenizas emanadas por el volcán chileno Puyehue el 4 de junio, para que puedan retornar las líneas aéreas y, así, los turistas extranjeros. En rigor, la ANAC habilitó el aeropuerto días atrás, pero todavía restan aspectos técnicos que resolver para que esté operativo.
Ayer al mediodía un avión de Andes, contratado como chárter por la agencia mayorista CVC, aterrizó con turistas brasileños en Bariloche como aeropuerto alternativo, ya que la neblina impidió que utilizara la terminal de Esquel, como estaba previsto, para trasladar luego a los pasajeros por tierra a la ciudad rionegrina. Pero fue un caso excepcional.
Las aéreas esperan la habilitación final de la terminal de Bariloche para retomar sus vuelos. Fuentes del sector aéreo estiman que las cancelaciones de vuelos en el país por las cenizas ocasionaron ya pérdidas por unos u$s 25 millones a las cuatro principales compañías, Aerolíneas Argentinas, LAN Argentina, Andes y Sol.
Mientras tanto, crecen las frecuencias a Esquel, con traslado por tierra a Bariloche, distante a 300 km., tramo a cargo del gobierno de Río Negro.
A Aerolíneas, que comenzó a volar a la ciudad de Chubut el 1º de julio, se sumó el sábado pasado LAN, con una frecuencia diaria los días de semana y hasta dos los sábados y domingos, para llevar turistas a Bariloche. "Significó una gran esfuerzo de operación, ya que Esquel no figura entre nuestras rutas. Hicimos un acuerdo con el gobierno de Río Negro, que traslada en micro a los pasajeros hasta Bariloche", explicaron desde LAN, que en temporada alta tenía hasta cinco frecuencias diarias al principal centro invernal argentino.
Los vuelos de LAN a Esquel superan el 75% de ocupación, entre argentinos y extranjeros.
En tanto, Aerolíneas ofrece tres frecuencias diarias a Esquel y cuatro los fines de semana, con igual sistema de traslado, con más del 85% de ocupación. "Para la temporada teníamos programados de seis a siete vuelos a Bariloche. Por las cenizas, implementamos Esquel como alternativa, con tres frecuencias diarias. La mayoría de los pasajeros son brasileños", explicó Juan Pablo Lafosse, gerente Comercial de Aerolíneas Argentinas. Sucede que la compañía tenía previsto conectar Brasil y Bariloche en la temporada. Para poder hacerlo, empezó a volar de Brasil a Aeroparque, donde los extranjeros hacen los trámites de Migraciones y Aduana, y luego los traslada en otro avión a Esquel. Pese a todo, por la falta de vuelos directos, las reservas cayeron 50%. "Hay chances de que se abra la terminal de Bariloche. Si eso sucede, la idea es sostener los vuelos que teníamos cancelados; tenemos pasajeros para seis frecuencias diarias", explicó Lafosse.
Bariloche está a la espera de la reapertura de su aeropuerto. "Nevó el fin de semana, el centro de esquí está habilitado, todas las excursiones también; el turismo joven funciona normalmente y están llegando en auto visitantes de Buenos Aires y el conurbano que empezaron las vacaciones. El problema son los turistas de Brasil, que no pueden llegar por avión", se lamentó Héctor Barberis, presidente del Emprotur, ente de promoción turística de Bariloche. "Antes del volcán, esperábamos 25.000 brasileños de junio a septiembre. Ahora con suerte serán del 10% o 15% de ese total, no más de 3.000, salvo que ya se habilite el aeropuerto", agregó. El invierno pasado, Bariloche recibió 120.000 pasajeros por avión, 28.000 de ellos brasileños.
Fuente: El Cronista Comercial
Autor: Nuria Rebón
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